No te imaginas la cantidad de clientes nuevos que me comentan que la publicidad en Facebook no les funciona.
¿Qué no funciona?
Estamos en un momento histórico a nivel de la capacidad para llegar con nuestros anuncios a miles de personas en muy poco tiempo y a un precio ridículo comparado con lo que se hacía hace 20 años solamente.
El poder de las redes sociales ha cambiado el juego por completo.
Ahora cualquier persona que pueda invertir 5 euros diarios tiene el potencial en sus manos de darle una visibilidad increíble a su negocio. Esto, como te digo hace unos pocos años era impensable.
El poder de la segmentación y de enseñarle el anuncio adecuado a la persona adecuada en el momento adecuado hace que ahora se esté abriendo la mayor oportunidad para crear un negocio al alcance prácticamente de cualquiera.
Eso sí, si vas a ciegas lo más probable es que te equivoques y generes la falsa percepción de que el marketing en redes sociales no funciona.
Ya hay decenas de profesionales en España que están facturando millones cada año con sus campañas de publicidad en redes sociales. Las grandes empresas se han dado cuenta de esta gran oportunidad y ya se están poniendo las pilas a toda prisa. Y los que todavía no han empezado se enfrentan con el reto de aprender lo necesario para aprovechar la gran oportunidad que estamos viviendo.
La publicidad en redes sociales, además, ha traído de la mano la posibilidad de automatizar una gran parte de las ventas a través de los productos digitales o infoproductos. ¿No sabes lo que es un infoproducto? En el próximo artículo te lo cuento.
Pero vamos a lo que hemos venido. Hacer publicidad en redes sociales es muy sencillo y prácticamente cualquier persona tiene acceso a las herramientas necesarias para crear campañas de publicidad en internet. Pero es cierto que hay conocer algunos conceptos previamente para garantizar que les puedas sacar el máximo provecho a estas herramientas.
En este artículo te voy a explicar los 3 conceptos que al entenderlos y aplicarlos han multiplicado la efectividad de mis anuncios en redes sociales.
1. Aprender a crear las audiencias o públicos y a hacer test
Uno de los principales errores que se cometen cuando se empieza a hacer publicidad en Facebook es desconocer cómo administrar correctamente la creación de públicos.
Por lo general se usan públicos demasiado genéricos y demasiado grandes. Esta forma de crear las audiencias casi garantiza el fracaso de tus campañas.
Imagínate. Si tú necesitas conseguir 10 clientes para un curso online de coaching y apuntas a una audiencia genérica de 1.000.000 de personas es como jugar a la lotería. Vas a tener que gastar mucho dinero para encontrar a las personas ideales para tu curso en un público tan grande.
Lo más probable es que definas la edad, el sexo y el lugar y luego pongas como intereses “coaching”, “crecimiento personal” y algunos más. Si ya tienes algo de experiencia puede que pongas también algún autor conocido como Tony Robbins. ¿Verdad?
El pensamiento lógico sería cuanto más grande el público mejor. Cuanto más rango de edad mejor. Cuanto más grande el área al que apunte mejor. Pero es justo al revés.
Si lo haces así vas a tener varios problemas.
El primer problema que vas a tener como te decía, es que vas a tener que hacer una inversión demasiado grande para encontrar a tus clientes ideales entre tanta gente.
El segundo problema que vas a tener es que vas a necesitar más dinero aún para recorrer un público tan grande y obtener datos fiables para saber si ese público es rentable o no lo es.
Y el tercer problema que vas a tener es que vas a tener una competencia atroz dirigiéndose al gran público con producto probablemente mejor trabajados que los tuyos.
Acota tus públicos
Tienes que superponer intereses para crear un perfil de cliente mucho más concreto que reaccione mejor a tu publicidad. Tienes que crear públicos pequeños que puedas recorrer con la inversión de la que dispones para obtener datos fiables de cómo funciona ese público.
Haz pruebas y tests
Reparte tu presupuesto en varios anuncios y varios públicos e invierte poco al principio. Así podrás contrastar que anuncio funciona mejor y que público reacciona mejor y poner toda la carne en el asador con mucha más confianza y rentabilidad.
Crea anuncios de captación y anuncios de retargeting
La mayoría de las personas necesitan varios impactos para comprar un producto o servicio. Por eso tienes que empezar a detectar que personas reaccionan a tus anuncios para mostrarles a esas personas un segundo y un tercer anuncio. De esa manera trabajarás solo con las personas que están reaccionando al primer impacto y tus campañas serán mucho más baratas y efectivas.
2. El coste de adquisición por cliente dependiendo de tu producto o servicio
Otro error muy común es no tener ni idea cuanto me puedo gastar para conseguir un cliente. Esto genera mucha incertidumbre e incluso ansiedad. Si no sabes cuál es el límite de gasto que te puedes permitir para obtener un cliente, difícilmente podrás hacer lo necesario para que tus anuncios funcionen.
Para esto tienes que conocer con exactitud que gasto te genera entregar tu producto o servicio y que beneficios te deja. A partir del beneficio neto tienes que calcular cuánto le puedes restar a ese beneficio para que tu producto o servicio siga siendo rentable.
Esto no siempre es tan evidente, pues puede que te interese ganarle muy poco al principio pensando en una mayor rentabilidad en el futuro.
Por ejemplo:
Si vas a vender un curso de coaching a 400€ de los cuales tu percibes 200€ netos podrías llegar a gastarte 100€ para que una persona se apunte a tu curso y que te siga siendo muy rentable.
Lo importante es que ese dato sea lo más estable posible para que puedas escalar tu publicidad.
Es decir, ¿Qué es más rentable para ti? ¿Ganar 200€ por cada persona que se apunte a tu curso y que se apunten 5 personas? O ¿Ganar 100€ por persona pero que se apunten 20?
Lo que le ocurre a la mayoría de anunciantes es que invierten 20, 30 o 50 euros en su campaña, no se apunta nadie, les entra el miedo y abandonan. El problema aquí es que puede que en tu caso el coste de adquisición para ese producto esté en 70 o 80€. Pero no te atreviste a llegar hasta ese punto y te quedaste con la sensación de que tu publicidad no funciona.
¡Y no es así!
Tienes que conocer dónde está el umbral y en qué momento se producen las ventas para atreverte a traspasarlo.
Tengo clientes que se gastan 500 o 600€ para conseguir un cliente que les pague 2.000 o 3.000€ por un producto o servicio. Lo bueno es que han construido un sistema a través del cual ese dato se ha vuelto estable y pueden escalar.
También ocurre que a veces tienes muy poco margen de ganancia en un producto o servicio. Si tu beneficio neto es muy bajo, por ejemplo 20 o 30€, vas a tener que generar una estrategia que te permita obtener clientes a un coste muy bajo. O crear un producto en donde puedas rentabilizar más a esos clientes después de su primera compra.
Si empiezas a manejar y entender este concepto toda tu mentalidad como emprendedor va a cambiar y pasarás de ver la publicidad como un gasto a verla como una inversión.
Esa es la clave.
3. Las temperaturas de los públicos o como vender a la persona adecuada; en el momento adecuado; con el anuncio adecuado
Imagínate que ves por la calle a un chico a una chica que te gusta e intentas darle un beso. ¿Qué crees que ocurrirá? Lo más probable es que no solo no te deje darle un beso sino que te mande a paseo y pierdas tu oportunidad para siempre.
Necesitas unos pasos previos. Necesita activar en él o ella las emociones adecuadas para que se abra a un beso.
Con la publicidad ocurre lo mismo.
La mayoría de personas están tratando de vender sus producto a personas que no les conocen de nada en una primera interacción. Y eso no funciona.
Necesitas generar 3 emociones: Interés, confianza y deseo.
Cada una de estas emociones hay que trabajarlas previamente para que una persona se abra a comprarte un producto o servicio. Si las trabajas bien la rentabilidad de tu publicidad se puede multiplicar por 10 o por 100.
Tienes que entender cómo funciona la publicidad en las redes, cuando se muestra y a quien se les muestra.
Vende primero a quien ya te conoce. Y si nadie te conoce crea anuncios primero para darte a conocer sin tratar de vender nada. Los anuncios de interacción funcionan mucho mejor y son mucho más baratos.
Una vez hayas creado un público que ya te conoce será el momento de ganarte su confianza.
Si tratas de venderles antes de que se haya generado el deseo internamente, no solamente no lo vas a conseguir sino que harás que sientan rechazo y perderás tu oportunidad para siempre.
Espero que te haya sido tan útil esta información como lo fue para mí en su día y que empieces, desde ya, a ponerla en práctica en tu negocio. Te vas a sorprender mucho con los resultados.
Si quieres que te ayude a poner en marcha estos conceptos y aprender a aplicarlos en tu negocio, rellena el formulario y opta a una sesión estratégica gratuita.
